jueves, 19 de julio de 2012

Por qué tantos alumnos raspados en bachillerato


Desde hace mucho tiempo, el mismo que llevo como madre y en contacto con otros representantes en iguales circunstancias, es decir, de mamá a mamá... me hacía una pregunta todos los días de mi vida...
Qué estará criando esta generación de Súper padres....
Y creo empezar a ver las respuestas, les confieso que pensé verlas muchos años después, pero como en esta vida todo va con una rapidez descomunal, las respuestas se adelantaron vertiginósamente.
Les vuelvo a explicar  mis observaciones, para quienes no han leído alguno que otro post anterior que en algún momento he escrito...
Nuestros padres no tenían acceso a libros de cómo ser mejores padres, cómo ser los mejores psicólogos del planeta con nuestros hijos, no existía la maravillosa estimulación temprana que hace que llevemos a los bebés al gym, que le pongamos música, preferíblemente instrumental a las barrigas, aunque nosostros mismos no la soportemos, que le pongamos videos a los bebés de un año y los queramos convertir en Einstein prematuros. Nuestros padres tenían los niños, los acurrucaban, les cantaban las pocas o muchas canciones que se sabían, nos atiborraban y obligaban a comer si era necesario y nos dormían.
El preescolar más cercano o el mismo donde iban todos los de la familia o de la cuadra era el propio para inscribirnos.
Nuestros padres repetían incansáblemente que el mejor legado que nos podían dejar era una buena educación y que nuestra principal función era estudiar. Los deportes los practicábamos por nuestra cuenta y si yo veía 2 ó 3 representantes en nuestros encuentros rutinarios era muuuuuuuuuuucha asistencia.
Nuestros padres sabían de nuestras notas y de regañarnos o felicitarnos por ellas, no de sentarse a discutir si el examen estaba bien o mal corregido, si los profesores eran o no estrictos o locos, o querían rasparnos a juro. Las luchas las hacíamos los alumnos cuando veíamos incoherencias o profesores que sentíamos que no lo estaban haciendo bien y ya todo el salón estaba en contra del profesor.
Pero llegaron los libros y programas de autoestima, crecimiento personal, autoayuda, metafísica, psicología al alcance de todos... y todo cuanto ser de 2 piernas lee un libro de lo que sea, siente que se convierte en un erudito de la información que leyó.
Somos la generación de padres con mayor acceso a las universidades que ha existido en la historia reciente de nuestro país, y los que no se han graduado de nada, tampoco importa, pues han leído uno, dos o mil libros que los han hecho profesionales igualmente....
Y pasamos al extremo opuesto de la generación de nuestros padres....
Si es posible desde preescolar los padres le hacen la tarea a los niños, para que quede "perfecta" y le pongan mil caritas felices.
Ya en primaria, para las exposiciones los padres se ponen de acuerdo con otros padres para ver quién hace cada cosa, léase bien, padres, porque según ellos, los niños no están capacitados para hacer tal travesía, y claro que no, a la altura que quieren llegar los padres no lo harán, pero sí a la que ellos tendrían que llegar....
Ponquecitos, caramelos, franelas con los motivos de la exposición y un sinfín de ridiculeces que no tienen absolútamente nada que ver con una exposición en la que les recuerdo debe entregarse algún material si el docente lo solicita, relacionado con la exposición, para que los demás niños tengan acceso a la información que no les quede grabada de la exposición de sus amiguitos....Todo lo demás es para las piñatas y para meriendas de cumpleaños...pero en virtud de la constantes insistencia de los representantes, los docentes terminan aceptándolo y hasta cayendo en el juego de la tontería.
Se organizan fiestas, una más grande que la otra para celebrar cada uno de los logros de los niños, es que hemos leído que hay que reforzar lo positivo.... sí, es verdad, pero hasta dónddeeeeee.
Caravanas con globos, carros pintados, fiesta, toga y birrete para la graduación de preescolar.... Muy bien, somos fiesteros....
Fiesta de fin de cada uno de los grados que va pasando el muchachito...
Se graduó de 6to. grado!!!!! una fiesta más grande.... aunque no haya terminado la etapa básica aun...
Si practican fútbol, beisbol, natación o cuanto deporte practiquen, todas las competencias les pueden significar la entrada al mejor equipo del mundo, cualquier gasto es justificable en función del sueño del niño.... Hay un viaje para Canadá, España, Portugal, Inglaterra, etc. o todos el mismo año y allá van, todos quienes, aunque sea pidiendo prestado, mandarán a su hijo (hasta de 7 años) porque ese es su futuro... ojo, no lo estoy inventando, lo he escuchado...
Y llegan a 7mo. grado.......
Hay fiesta en el Italo, en el VAC, en casa de fulano, en casa de mengana, venme a buscar a la una, o a las 2 o a las 3.... y allá va un buen lote de muchachitos de 12, 13, 14 "añotes", cómo no lo voy a dejar ir, si van "todos los demás".
Hay que mandarlos a estudiar inglés en las vacaciones a Canadá, a Inglaterra, por intercambio o en residencias.... antes, recuerdan? lo hacíamos en 4to. y por lo general en 5to. año... cuando le poníamos más interés al asunto y no se viajaba con un grupito de conocidos que no ayuda en nadita a que hablemos en otro idioma...
Y terminó 7mo. grado..... Padres, madres, niños y todo ser relacionado con ellos, llorando, rezando, prendiendo velas y hablando de los profesores malvados, rasparon tal, o cual o tal y cual y cual y cual materia. No sabemos si se irá de viaje... Le quitaré las fiestas, o el celular, o el iphone, o ya no se qué quitarle, no le importa.
Y no hablo solamente de los raspados en notas, porque hay niños que no rasparán ninguna materia porque cada niño es distinto al otro, pero las consecuencias de esta realidad actual se verá en algún momento y en alguna circunstancia de vida, seguiremos estudiándola...
En resumen, se nos olvidaron las normas, los deberes principales, la responsabilidad única del niño en edad escolar, nuestra obligación como padres de ser sus orientadores, sus directores de orquesta NO sus panas, olvidémonos de lo poco o mucho que aprendimos de los libritos leídos de ser amigos de los hijos, eso no lo sabe entender un papá lector, eso sirve solo para psicólogos y no debería estar escrito en ninguna parte.
Un padre es eso, padre, los amigos están en otro lado, los amigos no tienen responsabilidad de formarlos y están para disfrutar con ellos, unos los orientarán, otros no serán los mejores guías, pero los padres deben obligatoriamente cumplir esa función y LAMENTÁBLEMENTE, no lo estamos haciendo.
Allí está la respuesta a POR QUÉ TANTOS RASPADOS...
Pretendiendo eliminar los enormes abusos que se cometían con los niños, se comenzó a ejercer presión para defender sus derechos y eso estuvo muyyyy bien, pero se nos olvidó seguir simultáneamente resaltando sus deberes.
Los alumnos no están raspados, están realmente raspados, los padres de esta generación, que estamos criando personas sin fuerza ante el fracaso, con un stress innecesariamente alto, con mayor propensión al suicidio adolescente que en generaciones anteriores, porque sencillamente, no saben perder, no aceptan un no por respuesta (porque siempre se les justifica en extremo el no o simplemente se cede ante el si).