martes, 14 de abril de 2009

Yo, tú, él, nosotros, vosotros, ellos....

Todos, absolútamente todos sabemos que la gente no cambia...
Pero todos nos engañamos y nos hacemos los tontos...
Si, la gente se acomoda, se adapta, se cohibe, se se... pero no cambia.
De allí el dicho bien dicho: "el que nace barrigón, ni que lo fajen chiquito".
A mis amigos cercanos que alguna vez leen el blog les digo mi opinión.
Hay una gran diferencia en cada relación.
Unos montan cachos desde siempre... y lo seguirán haciendo igualmente siempre...porque siempre tendrán una buena excusa, una buena causa, una buena razón y una buena oportunidad.
Otros montan cachos eventualmente y circunstancialmente... y no necesáriamente lo seguirán haciendo pues es lo primero, eventual o circunstancial.
Otros serán aburridísimos y no les gustará salir a ninguna parte, preferirán la comodidad de su casa y fastidiarán a la novia fiestera que saldrá sola o los dejará y se conseguirán ambos a alguien más parecido con quien repetir la historia con otras características.
Otros serán tan inquietos que fastidiarán a la novia o esposa casera a quien por supuesto le montarán cachos por aburrida.
Nada es perfecto, muy a pesar de los que sueñan con ello.
Lo ideal es disfrutar lo que se tiene, porque mientras se busca lo ideal, se pasará la vida y se perderá el tiempo.
Que si montan o no montan cachos, que si hay que cuidar a fulano o a mengano. NOOOOOOOOO. Por Dios. Que cada quien se cuide solo.
Los monopolios no son buenos, hay que crear asociaciones, dejarse de idioteces y preocupaciones quinceañeras.
En Venezuela se solía decir muy a lo mero macho
"cuida tu vaca, que mi toro anda suelto"
Ahora las cosas han cambiado tanto que hay que decir...
"cuídense las vacas y los toros por sí mismos, porque están todos en estampida"

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