De regreso... desde Pariaguán.

Así te reciben en Pariaguán.

Pensé que eran muy pocos días para llegar hasta allá y por supuesto luego tener que regresar, pero estar en una finca, despertarse con un gallo antojado dándote vueltas alrededor porque no te despiertas desde las 3 de la mañana, los caballos relinchando a media noche, imagino que celebrando que los fastidiosos que los montaban dormían, los becerros llamando a sus mamás porque no los dejaban verlas para ordeñarlas al día siguiente, aunque parezca molesto, es totalmente relajante cuando no se está acostumbrado a ello.

Insólitamente a las 6 de la mañana todos los que estén se despiertan.... claro, con semejante ayuda quién no?

La conversación a primera hora, casi sin abrir los ojos, el turno de los niños para montar al ya no tan emocionado caballo de la media noche.

Al segundo día, los caballos escondidos por si acaso los encuentran y vuelven a tener que pasear hasta dejar la lengua en el piso.

Definitívamente, y contra todo pronóstico, llegamos descansados, relajados y no como cuando se trata de unos días en la playa, cuando se necesitan otros tantos para descansar.

Las carreteras, Diosssssssssssssss, divertidas si, por aquello de que si son lisas uno se duerme. No hay UNA, ni UNA SOLA que sirva. El asfalto lo lanzan desde avionetas, cae por pedacitos intermitentes, eso en la vía de ída por Los Llanos, de regreso lo lanzan desde helicópteros, queda aun más intermitente, pero como eso lo sabemos, no hay novedad.

Hacía mas de 20 años que no pasaba por la vía entre Barbacoa y El Sombrero, pero fue como si hubiera ído hace un mes... unos parchecitos más fue la diferencia.

Comprobado está aquello de que para lograr cambiar de presi hay que llegar al interior del país. En todas las fincas, conucos, todos tienen un tractor, de esos que vimos que también le regalaron a Bolivia. No tendrán más nada, pero tractor tienen, así que si quieren ganarse a los pueblos, regálenles molinos de viento para que tengan agua también. Allí les va una nueva para la oposición con poder, aprovechen...

Pariaguán tiene muchísimas tiendas, la colonia China en pleno, cómo fueron a parar tan lejos!!! Definitívamente si siguen como van y con la cantidad que son, van a invadir el planeta, no vamos a necesitar extra terrestres, con todo mi respeto, hay que venerarlos y rendirles pleitesía porque lo han sabido hacer.

El regreso, antes del túnel de Los Ocumitos, la cola del embudo por el hombrillo ya utilizado por todos y mediano tráfico en el camino desde San Casimiro, pero ligero en general.

Aquí en mi pueblo, una nueva sorpresa al regresar. Las calles ya las estaban limpiando para que amaneciera un miércoles limpio sin rastros de las fiestas, la gente como que no vino el martes de carnaval para no agarrar colas, extraña tanta conciencia pero se agradece encontrar tanta calma, lástima por los vendedores. Todos los semáforos estaban intermitentes para agilizar el tráfico, excelente idea, un fiscal en cada esquina. Será que nuestro nuevo gobernador va a seguir barriendo bien???... Eso esperamos.